Hoy Lunes 7 de Abril QUINTA SEMANA DE CUARESMA

 

        



NOS SALUDAMOS

¡Buenos días! Un día más comenzamos nuestra jornada dedicando unos minutos a reflexionar con Dios.

NOS SERENAMOS

Nos sentamos en una postura cómoda, cerramos los ojos. Nos vamos relajando, dejamos todo y nos centramos en la respiración.

Hacemos tres respiraciones profundas, cogemos aire por la nariz y lo expulsamos lentamente por la boca, sin soplar. Al inspirar pensamos “Jesús mío” y al expirar, “ten piedad de mí”. Pienso solo en lo que estoy haciendo aquí y ahora.

Y ahora habiéndote tranquilizado, pide la serenidad de Dios que sale a tu encuentro. Así, como estás ahora, Dios te quiere y te habla... Por eso comenzamos haciendo despacio la señal de la cruz

NOS PREPARAMOS PARA LA ORACIÓN

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. En el nom del Pare i del Fil i de l'Esperit Sant. Amén. No nome do Pais e do Fillo e do Espírito Santo. Amén. In the name of the Father and of the Son and of the Holy Spirit. Amen. Au Nom du Père et du Fils et du Saint-Esprit. Amen

 QUINTO LUNES DE CUARESMA

Lectura del Santo Evangelio según San Jn. 9, 1-41(adaptado) 

En aquel tiempo, se encontraba enfermo Lázaro, en Betania, el pueblo de María y de su hermana Marta. María era la que una vez ungió al Señor con perfume y le enjugó los pies con su cabellera. El enfermo era su hermano Lázaro. Por eso las dos hermanas le mandaron a decir a Jesús: “Señor, el amigo a quien tanto quieres está enfermo". Al oír esto, Jesús dijo: “esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella”. Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Sin embargo, cuando se enteró de que Lázaro estaba enfermo, se detuvo dos días más en el lugar en que se hallaba. Después dijo a sus discípulos: “Vayamos otra vez a Judea”. Los discípulos le dijeron: “Maestro, hace poco que los judíos querían apedrearte ¿y tu vas a volver allá?” Jesús les contestó: “¿Acaso no tiene doce horas el día? El que camina de día no tropieza, porque ve la luz de este mundo, en cambio, el que camina de noche tropieza, porque le falta luz”. Dijo esto y luego añadió: “Lázaro, nuestro amigo, se ha dormido; pero yo voy ahora a despertarlo.” Entonces le dijeron sus discípulos: “Señor, si duerme, es que va a sanar”. Jesús hablaba de la muerte, pero ellos creyeron que hablaba del sueño natural. Entonces Jesús les dijo abiertamente: “Lázaro ha muerto, y me alegro por ustedes de no haber estado ahí, para que crean. Ahora, vamos allá”.

Apenas oyó Marta que Jesús llegaba, salió a su encuentro; pero María se quedó en casa. Le dijo Marta a Jesús: “Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano. Pero aún ahora estoy segura de que Dios te concederá cuanto le pidas”. Jesús dijo: “Tu hermano resucitará”. Marta respondió: “Ya sé que resucitará en la resurrección del último día”: Jesús le dijo: “Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees tú esto? Ella le contestó: “Sí, Señor, creo firmemente que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo”.  Cuando llegó María donde estaba Jesús, se echó a sus pies y le dijo: “Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano”. Jesús, al verla llorar y al ver llorar a los judíos que la acompañaban, se conmovió hasta lo más hondo y preguntó: “¿Dónde lo han puesto?” Le contestaron: “Ven, Señor, y lo verás”.  Jesús profundamente conmovido todavía, se detuvo ante el sepulcro, que era una cueva sellada con una losa. Entonces dijo Jesús: “Quiten la losa”. Pero Marta, la hermana del que había muerto, le replicó: “Señor, lleva cuatro días”. Le dijo Jesús: “¿No te he dicho que, si crees, verás la gloria de Dios?” Entonces quitaron la piedra. Jesús levantó los ojos a lo alto  y dijo con voz potente: “¡Lázaro, sal de ahí!”. Y salió, atado con vendas las manos y los pies, y la cara envuelta en un sudario. Jesús les dijo: “Desátenlo, para que pueda andar”. Muchos de los judíos que habían ido a casa de Marta y María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en Él.  

Palabra de Dios           

REFLEXIONAMOS

En este evangelio, Jesús llora por la muerte de un gran amigo. 

¿Qué valor la das tú a la verdadera amistad? 

Nombra a algún buen amigo que necesite que reces por él que le “Resucites” de sus problemas. Intenta darle Luz.

Anotamos debajo de nuestro mapa nuestra reflexión.

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TERMINAMOS

Recordamos el compromiso del calendario de Cuaresma Calasancia de hoy

Sigamos el camino que quiere Jesús para nosotros; Dejémonos iluminar, al igual que Jesús dio vida/luz a Lázaro, compartamos la Luz de nuestro Padre con los demás.


Hemos finalizado el itinerario llegando a la Cruz  y el próximo Domingo de Pascua con la Resurrección de Jesús, habremos encontrado el gran TESORO de JESÚS. 

 NOS DESPEDIMOS 

Madre Divina Pastora, ruega por nosotros. Mare Divina Pastora, prega per nosaltres. Nai Divina Pastora, roga por nós. Mother Divine Shepherdess, pray for us. Mère Divine Bergère, priez pour nous.
San José de Calasanz, San Faustino Míguez y beata Victoria Valverde, rogad por nosotros. Sant Josep de Calasanz, San Faustino Míguez i beata Victòria Valverde, pregueu per nosaltres. San Xosé de Calasanz, San Faustino Míguez e beata Victoria Valverde, rogade por nós. Saint Joseph Calasanz, Saint Faustino Míguez and Blessed Victoria Valverde, pray for us. Saint Joseph de Calasanz, Saint Faustino Míguez et Bénis Victoria, priez pour nous.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. En el nom del Pare i del Fill i de l'Esperit Sant. Amén. No nome do Pai e do Fillo e do Espírito Santo. Amén. In the name of the Father and of the Son and of the Holy Spirit. Amen. Au Nom du Père et du Fils et du Saint Esprit. Amen

 



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